La Tarta Trianon, también conocida como Tarta Royal, es un clásico de la repostería francesa que destaca por su elegancia y sofisticación. Su origen se atribuye a los talleres de Gaston Lenôtre, un renombrado pastelero francés que revolucionó la pastelería moderna en la segunda mitad del siglo XX.
Esta tarta se compone de varias capas que combinan diferentes texturas y sabores. La base es una dacquoise de avellana, un bizcocho ligero elaborado con claras de huevo y avellana en polvo. Sobre esta base se añade una capa de praliné crujiente, que aporta un contraste de textura gracias a la inclusión de feuilletine, unas finas galletas crujientes conocidas como “Gavottes”. Finalmente, se corona con una suave mousse de chocolate, elaborada a partir de una ganache montée, que combina chocolate y nata montada para lograr una textura aireada y cremosa.
El nombre “Trianon” hace referencia al Petit Trianon, un pequeño palacio situado en los jardines de Versalles, asociado a la realeza francesa y conocido por su refinamiento. Por otro lado, la denominación “Royal” resalta el carácter noble y distinguido de este postre, evocando la opulencia de la corte francesa.
Aunque no existe una fecha exacta de creación, se estima que la Tarta Trianon surgió en las décadas de 1960 o 1970, coincidiendo con la época en que Gaston Lenôtre popularizó muchas de sus innovaciones en la pastelería francesa. Lenôtre, nacido en 1920 en Saint-Nicolas-du-Bosc, Normandía, abrió su primera tienda en París en 1957, y su influencia se expandió rápidamente, consolidándose como una figura clave en la gastronomía del siglo XX.
La Tarta Trianon ha trascendido las fronteras francesas, convirtiéndose en un referente en la repostería internacional. Su combinación de texturas —la suavidad de la mousse, el crujiente del praliné y la esponjosidad de la dacquoise—, junto con la riqueza del chocolate, la han hecho popular entre los amantes de los postres en todo el mundo.
Hoy en día, esta tarta se encuentra en las vitrinas de numerosas pastelerías de renombre y es una elección frecuente en celebraciones y eventos que buscan añadir un toque de distinción y sabor auténtico de la repostería francesa clásica.